No cabe duda que la risa puede ser contagiosa, más cuando es de verdadera felicidad, esto lo comprobó una pequeña niña de Nigeria, quien con sus carcajadas, ha recorrido el mundo en un video viral subido por el activista Bilal Erkus.

En el videoclip se puede ver como la pequeña, quien además es huérfana, cierra los ojos ante la orden de Bilal, esperando que este le de un regalo.
Bilal habla a la cámara en un susurro misterioso y después saca un paquete, pidiéndole a la niña que habrá los ojos y es entonces que la magia comienza, ya que la pequeña emocionada abraza la bolsa y comienza a reír casi a bordo de las lágrimas.
Sin poderse contener abraza al activista feliz y conmovida, mientras no deja de ver la hermosa muñeca que le regalaron.