MÉXICO.- Luego de que surgiera un video de un supuesto Rafael Amaya teniendo delirios de persecución, llamando a la policía porque creía que alguien lo quería secuestrar.
Además, se rumora que el actor, de 44 años, recayó en las drogas, sin embargo, su manager se ha encargado de desmentir esos rumores, incluso un empresario salió a defender al sonorense.
El empresario Tony Hernández declaró que hace unos días tuvo una cena con Amaya, donde hablaron sobre promocionar peleas de box, y no parecía que anduviera en drogas.
“Yo vi un Rafa Amaya centrado, sin ningún problema de ningún tipo, no hubo alcohol (en la cena), comimos muy ‘agusto’, nos divertimos, inclusive se mostró muy interesado en apoyar a la sociedad civil (…) la plática se trató de unas peleas en las que él nos va a apoyar y quiere entrarle a la promotoria del boxeo”, explicó Hernández.
El hermosillense estuvo varios meses alejado de las cámaras y las redes sociales debido a que estuvo internado en una clínica de rehabilitación.